La adopción de vehículos eléctricos está ganando cada vez más interés entre los consumidores conscientes de las cuestiones medioambientales y entre aquellos que buscan un ahorro considerable en los costes de mantenimiento de un vehículo privado. Sin embargo, surgen preguntas sobre cómo manejar la carga de vehículos eléctricos si no tiene un garaje privado. La posibilidad de comprar un coche eléctrico sin garaje o plaza de aparcamiento es una cuestión relevante y ampliamente debatida por los aficionados a las cuatro ruedas.

Existen soluciones cómodas y prácticas para aquellos que desean pasar a la movilidad eléctrica sin la comodidad de un garaje doméstico, adoptando estrategias sencillas para la recarga del vehículo y teniendo en cuenta algunos factores clave para no sufrir inconvenientes o problemas durante el uso diario de su vehículo eléctrico.

Puedo comprar un coche eléctrico sin garaje?

Comprar un coche eléctrico sin tener un garaje puede parecer al principio un problema a veces insuperable, con el temor de tener que ir a menudo en busca de las columnas donde dejar el coche, especialmente durante la noche. Estos problemas con los BEV modernos están casi superados, porque con una planificación adecuada y las numerosas alternativas disponibles se convertirá en un hábito viable sin tener que inventar más de lo necesario.

Si bien un garaje puede ofrecer la comodidad de una recarga privada y segura en cualquier momento, existen varias opciones alternativas que permiten a los propietarios de automóviles eléctricos aprovechar al máximo las ventajas de la movilidad eléctrica.

Los modernos coches eléctricos son capaces de ofrecer una amplia autonomía, que puede alcanzar hasta 600 km con una sola carga. Esto significa que no es necesario recargar cada noche, haciendo la falta de un garaje menos problemática.

Además, las ciudades de hoy están equipadas con una amplia red de estaciones de carga rápida, que permiten cargar completamente un coche eléctrico incluso en el plazo de una hora. Esto hace posible recargar mientras estás en el trabajo, comprando o haciendo otras actividades diarias.

 Con una red tan extendida de estaciones de carga y una autonomía cada vez mayor de los coches eléctricos, la falta de un garaje ya no es un obstáculo significativo para cualquiera que esté interesado en pasar a la movilidad eléctrica.

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Alternativas al garaje para recargar el coche

Existen varias alternativas prácticas y a veces creativas que permiten a los automovilistas disfrutar de las ventajas de la conducción eléctrica incluso sin un espacio dedicado. La falta de un garaje personal puede hacer que sea más complejo cargar un coche eléctrico, pero no es necesariamente un obstáculo, solo hay que saber aprovechar los recursos disponibles y planificar con cuidado los tiempos de carga del vehículo.

Wall box

Una solución eficaz es la instalación de un wallbox en el exterior de su vivienda. Para aquellos que viven en apartamentos sin garaje, la instalación de un wall box podría ser una primera opción a considerar y que puede ser adoptada con seguridad también en contextos compartidos.

Esta opción prevé la instalación de un wallbox en una zona comunitaria, como por ejemplo el parking o la zona exterior, una solución asequible y accesible para todos los condominios interesados en la movilidad eléctrica.

La wallbox, diseñada para resistir a los agentes atmosféricos, permite recargar cómodamente el coche eléctrico con una recarga rápida y fiable, haciendo más fácil la gestión de la movilidad eléctrica también para quienes no disponen de un garaje personal. La gestión de la recarga en este caso puede organizarse a través de un sistema de reserva y reparto de los gastos de instalación.

Estaciones de carga públicas

Las estaciones de recarga públicas son cada vez más comunes en muchas áreas urbanas y suburbanas. Estas estaciones de carga se pueden encontrar en aparcamientos públicos, gasolineras, supermercados y otros lugares públicos.

Si no tienes un garaje y necesitas recargar tu vehículo eléctrico, puedes buscar puntos de recarga públicos en la zona a través de las aplicaciones y sitios web dedicados. Estos servicios permiten localizar las columnas más cercanas y planificar la carga en consecuencia, ofreciendo diferentes potencias de carga adecuadas para todos los usuarios, desde potencias más bajas de 3,7 kW hasta ultra rápidas de 50 kW o más, capaces de soportar diferentes estándares de conexión. Esto proporciona la mayor libertad de elección en cuanto a velocidad y potencia de carga, según sus necesidades y el tiempo que tenga disponible.

Las estaciones de recarga públicas están gestionadas por diferentes operadores y generalmente admiten diferentes métodos de pago, como suscripciones, aplicaciones y tarjetas de crédito.

Wallbox de empresa

La wallbox para empresas son soluciones de carga para vehículos eléctricos que pueden instalarse en los locales de la empresa, aparcamientos u otras áreas gestionadas por una empresa. Estas cajas de pared ofrecen una opción conveniente para la carga de los empleados que poseen vehículos eléctricos y no tienen un garaje privado en su casa.

Esta posibilidad fuera de casa ofrece un acceso cómodo y sencillo para recargar fácilmente su vehículo eléctrico durante las horas de trabajo, reduciendo la necesidad de desplazarse en otros momentos buscando una estación de carga pública.

En el ámbito fiscal, a menudo se ofrecen incentivos para la instalación de infraestructuras de carga, que pueden ayudar a reducir los costes de instalación y gestión de las cajas de pared. La adopción de coches eléctricos sin garaje personal requiere una reflexión cuidadosa sobre las soluciones a su disposición. La instalación de una caja de pared corporativa, junto con el uso de columnas públicas y otras alternativas, ofrece a los conductores sin garaje privado la posibilidad de recargar sus vehículos de forma rentable y utilizando todos los recursos disponibles de manera inteligente. Estas soluciones demuestran que la transición a la movilidad eléctrica es cada vez más accesible, incluso para aquellos que no disponen de un espacio privado de carga o de un LREV caro y con una gran autonomía.